Cantar se ha catalogado como una actividad de «alto riesgo» de contagio. Para las y los cantantes líricos esta sentencia determina su subsistencia, su estado emocional y confina la pasión que moviliza muchos ámbitos de sus vidas. Algunos son intérpretes activos, otros docentes, algunos cantan en colectivo y otros son solistas. Sin duda cantar es un medio de comunicación que se manifiesta en diversas formas, pero todas ellas, hoy (en pandemia) representan algo «peligroso».
Queremos y debemos cultivar la disciplina del canto, tal vez en una nueva caracterización, con distinto ropaje. Al parecer la mascarilla y el distanciamiento físico nos acompañarán un tiempo más, por lo que debemos prepararnos, estar dispuestos al cambio y seguir cuidándonos sin dejar de hacer y mover nuestra pasión.
Para colaborar, ponemos a disposición de la comunidad de cantantes, coreutas, directores y administradores culturales, el trabajo que la Asociación Chilena de Seguridad ACHS, ha dispuesto como un paquete de medidas de prevención del contagio de la Covid-19 en agrupaciones corales.
Creemos que las medidas aquí propuestas son viables. que si nos adaptamos juntos y damos señales de que cantar es seguro, podremos retomar nuestro arte y seguir creando para preservar la disciplina del canto y continuar emocionando a nuestro público.
